lunes, 15 de marzo de 2010

La batalla no es vida

La vida es un regalo y bien malo el que me la dió,
por que nunca reparó en explicarme como usarla,
se ve que debo formarla, mejorarla y protegerla,
no cederla o venderla, sino más bien disfrutarla.

Tiempo después embargarla y darla por el respeto,
quien soy? era mi secreto, muy inquieto y escondido,
incluso más que el olvido perdido entre la memoria,
de aquellos restos de historia en los que había sufrido.

Así cerré mis oídos y mis latidos se hicieron mudos,
callé con lanza y escudo, aquel desnudo sentimiento,
de mostrar lo que había dentro,ese epicentro de dolor,
que hoy se ha vuelto un honor y de este escritor tratamiento.

Fue mi mejor instrumento, el aliento de esta boca,
y aunque a veces se equivoca y le toca disculparse,
nunca intentó conformarse o guardarse una pregunta,
buscó palabras con punta, para poder liberarse.

Uno puede acostumbrarse a negarse ser sincero,
y es ahí donde difiero y no exagero en lo que digo,
el tormento y el castigo, lo predigo en el que calla,
pues no hay peor batalla, que la que hallas contigo.

2 comentarios:

  1. Claro está que nadie puede decirnos que hacer con la vida, si no ella con sus actos; que no sólo son los nuestros, si no también de quienes nos rodeamos, ahora bien: la vida hay que aprenderla y protegerla, ¿Pero es ella quién decide que hacer con nosotros? Es hoy un día de irreflexión; sos vos; soy yo, somos nosotros quienes debemos saber que hacer para sentirnos vivos en este planeta. No hay peor batalla que la nuestra. El humano, provocando a la vida. Seamos justos cuidemos lo que amamos.

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  2. Definitivamente tú formas parte de aquellos que gustan de un manual de explicación.
    Al menos eso deduzco por lo aqui escrito, mientras que debo confesar existimos algunos que NO deseamos nos expliquen o nos muestren o nos indiquen como se deben hacer las cosas. Aquellos que preferimos perder el tiempo intentando porque quizas erroneamente nos sentimos autosuficientes e incapacitados de aprender. No lo se. Pero si alguien me hubiera mostrado como es la vida,al darmela tal vez no hubiera querido vivirla, ya que la misma a pesar del equilibrio que existe entre lo justo y lo injusto, lo bueno y lo malo, es de acuerdo a nuestro estado de animo, que la vemos y la sentimos.

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